“Soy una mujer del Tarp. Estoy siguiendo el código no escrito de esta nueva comunidad femenina. He hecho voto de abstinencia. He devuelto los regalos que mi marido me hizo por navidades (pero sin decírselo, ya que todavía está deprimido) y estoy utilizando mis cheques regalo en las mejores tiendas para conseguir importantes regalos y otras necesidades”.