Pero hay algo que sobresale a todo eso, y es que desde siempre todos nos hemos prostituido de alguna manera. Por eso, todos y todas somos un poco Putas.
La Globalización y los modelos sociales de la mayor parte del planeta están basados en el consumo, marcados por gobiernos socialdemócratas con espejos de libertinaje consentido. En los libros que marcan los derechos democráticos, dice que todo ser humano tiene derecho a un trabajo y a una vivienda digna. ¡¡¡ Ja ¡¡. Sabemos de sobra que esto no se cumple, ni tampoco se hace cumplir. Que se lo digan, al ¨primer mundo ¨o a los ¨otros mundos ¨.
Por eso hoy existen las otras Putas, las señoras de apellido ¨noble¨ que reza a su Dios el mediodía del Domingo. La puta de rayas en WC. La puta secretaria del despacho de Don Onofre, que conserva su silla después de escribir el informe, al tiempo que le chupa el cipote. Las dependientas putas de las putas tiendas de moda. Las putas cajeras del centro comercial. La chofer del autobús de línea que nos lleva a la casa de las otras putas. La Chelo, que toma el café de las once en la degustación del encuentro. O la Juli que quiere comprarse un apartamento en Ibiza. También esta la estudiante de solfeo, la de piano. Y porque no, Matilde la educadora social amiga de Carlota, - esa que no se pierde una misa de Don Anselmo - se embelesa cuando cita a Mateo en su versículo octavo….Y tantas y tantos.
Así que para todas las Putas y Putos dedico esta canción de Tito Rojas. Y en especial, para las que me follaron salvajemente, para las que me engañaron inteligentemente, para las que me dejé engañar, para las miserables, para ¿ las de clase ¿. Y más que nada para todas las Putas que están por llegar.
Señora de Madrugada
Señora de madrugada
qué buen empleo, cobró por usar mi almohada y fue un recreo
señora de madrugada
qué gran estafa, mordí muy bien su carnada y qué bien trabaja.
Señora de madrugada, sin dueño alguno
en su carrera ganada no fui oportuno
señora de madrugada qué desperdicio
en vez de ser bien amada, ama su oficio.
Y sigue siendo señora frente a la gente
no importa si se enamora de algún buen cliente
y sigue siendo señora fiel a la cita
y su cara la decora, siendo bonita.
Señora de madrugada qué tonto he sido
vestirse a cambio de nada, seré su marido
señora de madrugada no se preocupe
no fue tan mala jugada, siempre lo supe.
Y sigue siendo señora frente a la gente
no importa si se enamora de algún buen cliente
y sigue siendo señora fiel a la cita
y su cara la decora, siendo bonita.
ella nunca está pendiente, no le hace caso, no le hace caso a lo que diga la gente
porque ella tiene que trabajar y tiene que luchar así para poder mantenerse.