¡¡ Que tiempos aquellos ¡¡
Alguna vez han escuchado eso de ..A todo cerdo le llega su San Martín ? , seguro que sí. La mayoría de las veces utilizamos esta frase para calmar nuestra mala ostia, nuestro desagravio, nuestra impotencia, ante alguien que nos ha hecho daño en algo que consideramos no es justo para nuestro interés, y además, totalmente convencidos de ello. Por eso le deseamos que le ocurra algo, aunque no precisamente lo que le ocurrió al cerdo cuando llego el día de San Martín. Bueno, al menos, quiero pensar que no.
Pues precisamente esta frase del cerdo, es la que aplíco yo al momento económico que estamos viviendo. A la economía de este país le ha llegado su San Martín, aunque es ahora en este preciso momento, cuando vemos su figura mas macabra, ya que estaba entre nosotros hace tiempo. Hablaría de sueldos, de hipotecas, de hambre, de paro y de miseria, pero ustedes como yo están hartos de escuchar lo mismo en estos últimos tiempos que corren, por eso no lo haré.
Les hablaré del Euro.. ¿ les suena ?, ¡¡ Si hombre ¡¡.. ese ( mal nacido ) que ha hecho de nosotros seres hipotecados de por vida, ese mismo que con su llegada nos hirió de muerte, nos hundió su espada mas afilada mas allá del esternón. El que ha hecho de nosotros, piltrafas clandestinas en las cuentas de la macroeconomía. El que osa cada día de convertirnos en ciudadanos caseros ( porque no hay mas remedio ). Ese en el que recae todas nuestras frustraciones, nuestros sueños, el maldito compañero de todas nuestras expectativas.
No entiendo de economía salvo contar lo que tengo y lo que tenia. Pero sigo implacablemente las noticias día a día, forzado por el estimulo del tiempo que tendría para dedicarlo a mi trabajo, pero son ya mas de 18 meses los que dedico a tener uno. Por lo tanto, mientras llega ( si lo hace ), dedico mis horas a escribir, a comer, a dormir, a fornicar con Lulú ( mi muñeca hinchable ), y a estar bien informado, aunque ésto último, no se si es bueno o malo para mi salud. Sea como sea, es lo que hago y lo que me apetece.
Toda la información, apunta, a que económicamente, nos vamos a la mierda, aunque algunos estemos en ella hace tiempo. Pero no sólo nosotros, la economía mundial también. Las informaciones que llegan de los países poderosos no es buena, hay datos que confirmarán tal augurio, los dará la Reserva Federal de los EE.UU. a finales de este mes, pero la mayoría de los analistas económicos sospechan que no serán buenos, y todos sabemos que la economía mundial, gira a través dé los ricos del planeta.
La crisis económica es mundial, lo cual a pesar de que en España los datos macroeconómicos, sean -según los entendidos-, buenos, inevitablemente, el día a día es lo que cuenta.
¿ Pero quien percibe antes que nadie esto ? . Siempre somos los mismos, es cierto, y les aseguro que desde que entro el éuro, la vida de los mismos, es menos vida. Vale que mucha culpa es nuestra. Es decir, es cierto que vivimos por encima de nuestras posibilidades, que somos muy consumistas, que por cojones aunque no tengamos o no nos llegue, tenemos que ir de vacaciones en verano, en semana santa, el puente o el acueducto de este o aquel mes, que tenemos que cambiar de coche porque a perdido ya algo de color la chapa. Que tenemos que tener el último grito en plasma de 2000 pulgadas. Que tenemos que salir a cenar cada viernes o sábado.Que tenemos que seguir tomando copas y follando con Katrina, la rusa del club ( Los Conejitos Saltarines ), cuando nos da el apretón. Que tenemos que seguir comprando en rebajas aunque éste o cual articulo, no nos guste o no nos valga ( pero es barato ) .
En fin, seguiría, pero ya saben de que hablo ¿ verdad ?.
Es cierto que seguimos viviendo como si nada hubiera pasado desde que entró ( el puto euro ), pero de un tiempo a esta parte, no se si todos, pero algunos ya nos damos cuenta, que es imposible, salvo el que sea un inconsciente o un irracional o un imbécil. Esto ya es insostenible, por eso también nosotros tenemos una gran parte de culpa de la situación economica que vive el conjunto del estado. ¡¡ Por supuesto que es imposible vivir medianamente holgado si somos mileuristas ¡¡ , aunque a decir verdad, no se como lo hacen las familias mas o menos de tres o cuatro componentes, con eso, e incluso con menos. Creo que ese el Gran Debate, o la Gran historia de Terror.
Sinceramente, pienso que viene una etapa ( algunos dicen que larga ) jodida, muy jodida. Mas jodida todavía de la que estamos, y a pesar de nuestros pesares, no tendremos mas remedio que atarnos los machos, pero esta vez de verdad. Si... lo sé, se que hace tiempo muchos lo hicieron ya... pero esta véz, la cosa va para todos, incluso para el gran capital, que ve como su dinero se esfuma en Bolsa, esa que ya nadie es capaz de realizar apuestas arriesgadas y ni tan siquiera elucubrar ganancias venideras.
A raíz de ésto, les invito a compartir éste interesante articulo que nos da una visión fundamental al hilo de mis cábalas. ¡¡ Disfrútenlo, como yo así lo hice.
( Un dia, en pesetas )
Escrito por Dioni. F. Nespral
Salgo a pasear y me encuentro que todo está en pesetas. De repente, pienso: ¡esto no puede ser, hemos vuelto a la peseta!. Dentro de mí se estimulan las neuronas, ahora toca volver a los buenos precios.
Por la mañana, hago parada en la gasolinera, ya no recuerdo los días en que llenaba el depósito, pero como toca ir a Asturias, qué menos que darme el gustazo de llenarlo en pesetas: 11.000 del ala. En 2002, lo hubiera hecho por 7.100 pesetas. Desde luego, aquí si que se nota el cambio. Pero ya sabemos que lo que hemos cambiado es el "manejo de la liquidez", con lo que consumimos más o menos lo mismo, pero hacemos más visitas a la gasolinera.
El desayuno o el café a media mañana empieza a ser necesario y pago religiosamente las 230 pesetas que me pide Carlos. Esta es de las cosas que más me impresiona. ¿Tanto ha subido el coste de este producto?. Recuerdo esas 105 pesetas de antaño. La verdad es que en el terreno de la hostelería es complicado poner ejemplos positivos. En el menu del día me dejo 1.700 pesetas cuando antes comía tan ricamente por 900. Toca salir a cenar algo en un restaurante medio y nos dejamos la friolera de 12.000 pesetas cuando era bastante habitual hacerlo por unas 5.000 a 6.000 hace unos años, para dos personas.
Pero quizás donde más lo he notado es en la compra de alimentos. Empezando por el pan, que una barra vale ya de 100 a 120 pesetas, muy lejos de las 45 a 50 pesetas de antes. Hacer una compra semanal con todo (alimentos, carne, pescado y limpieza), nos llevó 27.000 pesetas. Aquí me ha dado ya un sofocón, porque no recuerdo haber gastado más de 14.000 pesetas un fin de semana en 2001 con el carro a reventar. Hoy cualquier tonteria del supermercado cuesta 166 pesetas. ¡Comprobado!
Por la tarde, qué mejor que un poco de cine para relajarnos de tanta tensión. Me asombro al pensar que por 2 entradas de cine estoy pagando 2.350 pesetas. ¿cómo?, ¡2.350 pesetas!. Vamos a ver, ¿el cine se abre sólo para nosotros o es que hoy incluyen las consumiciones de refresco y palomitas?. No. Es solo entrar a ver la pelicula. Dos refrescos y las palomitas ya escalan hasta las 1.000 pesetas. Me pregunto si las palomitas son de primera calidad cuando me resigno a comerlas frías y que más parecen chicle que otra cosa.
En realidad, entre unas cosas y otras, la cara que se te queda es de estúpido. La gente te mira como esperando que reacciones y la verdad, es mejor dejarlo estar y confiar que algún dia razonemos qué estamos haciendo. Porque algo no hemos logrado hacerlo bien. En el informe de la CEACCU, hay cifras muy entretenidas como incrementos del 107% en aperitivos, el 100% de la caña de cerveza, el 60 % de los vaqueros, el 163% de un corte de pelo, el 224 % de la bajada de bandera de taxi, un 100 % de entrar al museo del Prado, o el 90 % de la matricula de la universidad.
El paseo por el mundo en pesetas, ha resultado ser una pesadilla. Menos mal, despierto y veo que todo está igual: en euros. Que alivio. Soy feliz.
Nota: Según el INE, desde noviembre de 2001, que refleja el IPC que se aplicó en contratos y convenios para 2002, hasta el de noviembre de 2007, los precios han subido un 22,1 %. Es decir que eso sería "lo normal". Crecimientos superiores a eso, supondría que el esfuerzo para consumir un bien sería mayor. Normalmente, el esfuerzo para la adquisición de un bien, sería más complejo de determinar pues influyen varios factores, como la capacidad de endeudamiento, el tipo de interés, etc...
