Te confieso algo, tengo la impresión por primera vez de estar “vegetando”. No se si los síntomas son los mismos que los tuyos, pero me he sentido viejo cuando he sentido miedo. Parece como si hiciera mucho tiempo que no salgo a la calle. Comienzo a aislarme. Me molesta mucha gente. A veces incluso los miro por encima del hombro en un acto de irreverencia estúpida. Lo mejor de todo es que en este estado me encuentro bien. Me siento mejor. Pero estas imágenes me han producido miedo, pavor, inquietud y sobre todo mucha incertidumbre. Analicemos algo:Las imágenes salen a la luz dos años después a los hechos. Toda la basura ya ha sido arrojada hacia el nombre del asesinado. Se dijeron tantas mentiras que solo las cámaras ahora hicieron todo lo demás. Demostrar que por encima de una justicia universal, se encuentra la condena social jaleada por los medios más amarillos. Ahora no se retiraran las ofensas en primera plana. Ahora la primera plana se lo lleva la sangre. Los muertos ya no interesan.
¿ Como puede solo un individuo amedrentar a una multitud tan solo con una navaja ?. Donde estuvo la solidaridad de la gente ?. Donde se quedo el sentido de grupo, de defensa de lo justo de justicia ante tan vil ataque ?. ¿ Había alguien en el puesto de guardia donde se reciben al instante las imagenes de todo el circuito ?.
Hoy interesa salir en la foto. La gente necesita mas que nunca sentirse escuchada, observada. Vale todo o casi todo. Incluso una ideología de gases y campos. Hay personas que están tan solas de todo, que hacen amistades peligrosas con los filos de las navajas y estas se convierten en su razón de ser. El exponente más claro del individualismo salvaje. Ese prepotente y sabio que no fuiste no eres y nunca serás. Y estos seres oscuros habitan en tu mismo portal y viajan en tu mismo vagón. Debajo de sus axilas esconden la razón afilada de su fuerza y eso. Eso me da mucho miedo.
Te invito a que leas, mires y observes todo lo relativo a este suceso en el blog de Las Malas Lenguas un experto en hemerotecas...
