La noticia saltaba de madrugada a todos los teletipos informativos del mundo, la Reyna de Inglaterra, el Papa, el protagonista de Harry Pootter y Escarlet,detenidos y fichados por la policia de Canada. Al parecer los cuatro se conocen hace tiempo, y decidieron salir de rumba. El acto consistia en ir a una fiesta de disfrazes que organizaba un conocido magnate del petroleo. Estaban seguros de que darian la campanada y que la gente no se creeria que eran ellos mismos. Los de verdad, los de carne y hueso. La fiesta fué divertida, según señalan fuentes de toda solvencia, pero el alcohol, las drogas etc etc,tuvieron mucho que ver, cuando se desató una pelea en el Casino de Quebec. Un camarero quiso arrebatar el anillo Papal a su santidad. En fín, la trifulca fué tal, que acabaron de esta guisa, como se aprecia en las fotografias.
¡¡ Dios mio, donde vamos a llegar ¡¡. Pavernosmataotodos.