Bukowski dice:
Malos augurios se tornan en la vida del señor Rajoy.
Si hace unos meses el que era hasta hace unas semanas el presidente, nada mas y nada menos del Banco Mundial, Paul Wolfowitz se despacahaba de esta guisa en su estetica, y al poco fue destituido de su cargo por asuntos de enchufes y otras cuestiones, no lo es menos la del presidente del PP Mariano Rajoy, que las camaras recojieron esta instantanea.
Al parecer estas dos fotografias tienen algo en comun, a los presidentes, le gustan los tomates.
Rajoy tendria que estar espectante ante el futuro que le espera dentro del partido, hay delfines alrrededor de los tomates que pueden hacerle un roto mas grande.
Rajoy tendria que estar espectante ante el futuro que le espera dentro del partido, hay delfines alrrededor de los tomates que pueden hacerle un roto mas grande.
No obstante, las dos imagenes, son el poder y el dinero, imagenes que resultan lamentables y pateticas viniendo de donde vienen.
Mucho dinero se gasta en campañas electorales, para mejorar con tecnicas de fotografia, la imagen deteriorada de los politicos de turno, y por la magia de la tecnica hacer como que se rien campechanamente, todo eso se derrumba, sencillamente con un par de tomates en los calcetines. Ademas del rubor ajeno que se siente.
Hay que joderse, como esta el patio.
